La reducción de pecho es una de las operaciones de cirugía estética más demandada, pese a que paradójicamente no es tan popular socialmente.
A diferencia de otras operaciones, la decisión de reducir el tamaño del volumen mamario no siempre está relacionado con una mejora estética, sino también en una necesidad fisiológica, por salud de la paciente.
A continuación te identificamos 5 señales que, si notas en tu cuerpo, significa que una reducción de pecho es recomendable.
Sientes dolor en espalda y cuello
Un volumen mamario excesivo, supone un peso importante que el cuerpo de la mujer va a notar en el día a día. De forma progresiva, esto puede derivar en dolencias graves que sobre todo son notorias en la espalda y en el cuello.
Hay que tener en cuenta que, de no solucionarse este problema con una reducción de pecho, la paciente puede sufrir en el futuro problemas más importantes que un leve dolor y que condicionarán su día a día.
Por descontado, antes que nada hay que identificar que el dolor del cuello y de la espalda proviene de este caso en concreto y que no responde a otros problemas que podamos estar sufriendo sin ser conscientes de ello.
El tamaño del pecho crea complejos personales
Por descontado, la reducción de pecho puede responder a motivos estéticos, incentivados por complejos personales respecto a un tamaño demasiado grande, en base al gusto personal.
La mujer puede sentirse mucho más a gusto consigo misma, mejorar su autoestima y con ello también notará una mejoría en sus relaciones sociales.
La reducción de pecho no se limita a quitar volumen, sino que también permite lograr una proporción en armonía entre el pecho y el resto del cuerpo.
Tienes dificultad para actividades cotidianas
En ocasiones, un pecho demasiado voluminoso puede llegar a crear dificultades en actividades cotidianas, a las que normalmente no prestamos atención.
Es una mera cuestión funcional, pero que con la reducción de pecho nos permite disfrutar de una vida mucho más cómoda y agradable.
Cuando existen malformaciones que desean corregirse
Con la reducción de pecho es posible corregir algunas malformaciones presentes en esta zona del cuerpo. Por ejemplo, mamas tuberosas o asimetrías.
Como comentábamos antes, la reducción de pecho no se limita solo a actuar sobre el tamaño, sino que el resultado estético también es importante en la intervención. En este caso, por ejemplo, se lograría que la paciente tuviese unos pechos simétricos, acorde al resto del tamaño de su cuerpo y con una imagen estética atractiva.
Cuando se presenta caída de la mama
Normalmente se recomienda una intervención de elevación de pecho por la caída de la mama. Pero también es posible mejorar la flacidez del pecho mediante una reducción del volumen mamario.
Tanto en un caso como en otro, en Clínica Freire te aconsejaremos el mejor tratamiento, para que tu pecho recupere su forma original o incluso mejore a nivel estético, eliminando el efecto de caída de mama que puede sufrirse tras el embarazo, por un exceso de peso, pérdida rápida de peso o por efecto del paso del tiempo, entre otros motivos.